Tratar el Acné de Forma Natural

tratamiento acne natural

El acné es un problema de piel que afecto no sólo a los adolescentes sino a niños y adultos también. El acné puede ser común en mujeres en sus veinti tantos que nunca han tenido problemas de piel. El acné se manifesta de las siguientes formas: comedones, puntos negros, granos & espinillas.

Estas imperfecciones se manifiestan cuando ocurre una sobreproducción de sebo (grasa) de la piel de la cara y también del cuerpo cómo la espalda.

 

¿Qué provoca el acné?

En acné no esta provocado por un sólo factor, sino que ocurre cuando las glándulas sebáceas (grasa) se activan (alrededor de la pubertad), estimuladas por las hormonas masculinas de las glándulas suprarrenales. El sebo (aceite) es una sustancia natural que lubrica y protege la piel, pero en determinadas circunstancias, las células que están cerca de la superficie de la piel bloquean las aperturas de las glándulas sebáceas, provocando una acumulación de grasa debajo de la piel. Esta grasa estimula bacteria a multiplicarse provocando inflamación de los tejidos de la piel.

Los poros de la piel, a menudo agrandados, pueden taponarse imposibilitando el flujo normal de sebo y productos metabólicos de desecho hacia la superficie de la piel. La infección bacteriana resultante provoca la formación de granitos y espinillos.

  • Inflamación cerca de la superficie de la piel produce una pústula
  • Una inflamación más profunda en la piel provoca un grano;
  • Aún más profunda y es un quiste de grasa.
  • Si la grasa llega a la superficie de la piel, el resultado es un "punto blanco".
  • Si el aceite acumulado se pigmenta o se oxida, este se convierte en una espinilla o punto negro.

El acné puede estar provocado por varios factores externos cómo el estres, tocarse la piel constantamente, medicamentos tomados, contacto con productos grasientes...

 

¿Cómo se trata el acné?

Adonia te cuenta cómo prevenir, tratar y eliminar las impurezas de la piel.

Para combatir el acné, necesitamos conseguir 3 cosas:

  • 1. Limpiar los poros
  • 2. Matar la bacteria que provoca impurezas
  • 3. Regularizar la grasa de la piel.

Para abrir los poros y matar la bacteria que provoca las impurezas, se limpia la piel mañana y noche con un gel o un jabón suave con propiedades antibacterianas. 2-3 veces por semana, se exfolia la piel seguido por la aplicación de una mascarilla purificante.

Limpiadores:

La limpieza es la parte más importante del cuidado de la piel para mantener una piel sana y radiante. Para limpiar la piel en profundidad sin irritarla, es importante utilizar un gel limpiador o un jabón ultra suave que este compuesto de ingredientes naturales con propiedades antibacterianas naturales como el árbol de té o la lavanda. Limpiar la cara con productos agresivos para la piel puede estimular la secreción de sebo de la piel, dejando la piel más grasa que nunca.

Exfoliantes:

Para prevenir impurezas y mantener una piel sana, es importante eliminar la piel muerta que se produce cada día, exfoliandose la piel 2-3 veces por semana, con un peeling suave, seguido de la aplicación de una mascarilla purificante. Así, minimizaremos la probabilidad de que se ensucie la piel y regularizaremos la secreción de grasa natural de la piel.


Consejo Adonia:

Para lucir de una piel limpia y eliminar toxinas, evitar el maquillaje convencional que suele llevar ingredientes perjudiciales para la salud de la piel cómo derivados del petroleo (siliconas) y colorantes sintéticos, los cuales tapan los poros, impidiendo la respiración correcto de la piel y resultando en más impurezas.

Si quieres llevar maquillaje para tapar imperfecciones, escoger un maquillaje 100% natural para pieles mixtas-grasas, compuesto de plantas medicinales con propiedades cicatrizantes y desinfectantes cómo el Corrector Anti-Acné de Dr. Hauschka. o el Maquillaje Fluido Matificante de Logona.

 

Regularizar la grasa de la piel.

Tener un exceso de grasa es un desequilibrio de la piel y necesitamos regularizar su producción. Utilizar productos muy agresivos con la piel puede tener efectos contra-prudente y provocar una secrección de grasa exagerada. Hay varios productos naturales que regularizan la grasa de la piel como el aceite de jojoba biológico o aceites mezclados con propiedades purificantes. El aceite no siempre engrasa la piel, sino que puede llegar a regluarizar la producción de grasa de la piel, dejando una piel sana y libre de impurezas. Puede llegar incluso a eliminar quistes de grasa.


Consejo Adonia:

 

  • Al escoger tu crema hidratante de día, buscar un producto con textura fluida que lleve una composición de aceites regularizadores y pensadas para pieles grasas o con impurezas.
  • Si tienes la piel acnéica, eliminar la crema de noche y nadamás utilizar el gel limpiador seguido por el tónico.

 

Es importante tomar en cuenta que la piel no se regulariza de un día para otro. Se puede tardar varios semanas en regularizarse así que tu cuidado facial anti-acné requiere paciencia y constancia.